UN DÍA COMO HOY 21 DE MAYO NACIÓ
1759: Bernardo del Espíritu Santo, obispo mexicano.
(Fray Bernardo del Espíritu Santo Martínez y Ocejo (21 de mayo de 1759 Comillas,Santander, España - 23 de julio de 1825 San Sebastián, Sinaloa) quinto obispo de Sonora.)
Sufrió trabajos e incomodidades en su recorrido de 1200 leguas, confirmó más de sesenta mil personas y la concluyo en abríl de 1821. Como resultado de dicha visita autorizó pocos meses el establecimiento de la parroquia de Hermosillo.
El último obispo de Sonora durante la época colonial, llevó al extremo su fidelidad a los reyes borbones y se opuso, con más ardor que doctrina, a la independencia de México, como ocurrió con todos los obispos de la Nueva España.
En su Carta Pastoral, denostó contra el Padre Hidalgo, llamándolo: "fiel sectario de los espíritus fuertes, y partidario de sus errores", Por culpa del Padre de Dolores "lo sagrado y lo profano, lo divino y lo humano, lo eclesiástico y lo civil, ha tenido una misma suerte; ha sido arruinado".
De acuerdo con el gobernador intendente de las provincias, brigadier Antonio Cordero, giró instrucciones para que se jurara en todos los pueblos la Constitución de Cádiz y lo mismo ordenó en 27 de septiembre de 1821 a todos los párrocos, para que se hiciera igualmente con la independencia de acuerdo con el Plan de Iguala y que franquearan las iglesias para que los actos relativos revistieran mayor solemnidad. El 8 de diciembre dispuso igualmente que se celebraran honras fúnebres en todos los templos por el descanso de las almas de los individuos que habían fallecido en defensa de la causa de la independencia. En estos días se manejó con moderación y prudencia en todos sus actos, aunque no faltaron díscolos que lo señalaran con desafecto al nuevo régimen independiente.
En pastoral del 8 de julio de 1822 previno que habiéndose verificado la separación de México de España, en el canon de la misa y en la colecta se nombrara al emperador Agustín I en lugar del rey Fernando VI; fue nombrado Caballero de la Orden de Guadalupe; planteó la necesidad de crear otro obispado con las Californias; fue llamado a formar parte de la Primera Diputación Provincial de Sonora y Sinaloa y presidirla, pero al no asistir a la apertura de sesiones, su cargo lo toma el Teniente Coronel Antonio Pascual Narbona; avisó al Ministerio de Justicia sobre el levantamiento de los indios mayos desde Santa Cruz hasta Mochicahui, reentidos por el mal trato que les daba el jefe político de Sinaloa, y dirigió una pastoral a los párrocos y curas doctrineros para que contribuyeran a aplicarlas y los hicieran volver a su pueblos.
Salió en defensa de su secretario, presbitero Carlos Espinosa de los Monteros, diputado al Congreso General que se había retirado de la ciudad de México sin permiso del hermano de éste, Fernando, quien por la misma causa había ido removido de la jefatura política de Sinaloa.
En 1824 aparecieron en Guaymas los primeros brotes de la masonería, dictó órdenes para prevenir a sus ovejas y prohibió el baile del vals y la contradanza que hicieron su aparición en la misma época, bajo pena de excomunión.
Ordenó a los titulares de las parroquias que, con excepción de Arizpe que tenía título de ciudad, no recibieran a los ayuntamientos en las puertas de las iglesias y el 1 de julio de 1823 envió a su adhesión al Supremo Poder Ejecutivo Federal constituido a la caída de Iturbide.
En febrero de 1825 nombró gobernador de la mitra al presbítero Miguel Espinosa de los Monteros y días después inició su segunda visita pastoral por los pueblos del este de Sinaloa. Prosiguió rumbo al sur, se vio obligado a suspenderla en Concordia por haber enfermado de gravedad y falleció el 23 de julio del mismo año a las doce del día. Sus restos fueron sepultados en la iglesia del lugar.