UN DÍA COMO HOY 4 DE DICIEMBRE NACIÓ
1839: Melesio Morales, compositor mexicano
(Melesio Morales (Ciudad de México, 4 de diciembre de 1839 — Ciudad de México, 12 de mayo de 1908) fue uno de los más importantes compositoresmexicanos del siglo XIX.)
Melesio Morales nació en la Ciudad de México. Desde muy joven, mostró una gran aptitud para la música, pero su padre, D. Trinidad Morales, deseoso de que abrazara la carrera de ingeniero civil, le dedicó al estudio de las matemáticas haciéndolo entrar en la Academia de San Carlos. y alrededor de 1850 ya escribía sus primeros valses y canciones. Se dice que compuso su primera ópera, Romeo y Julieta, a la edad de 18 años. La obra fue estrenada el 27 de enero de 1863 en el Gran Teatro Nacional y fue interpretada por las sopranos Elisa Tommasi (Romeo) y Mariana Paniagua (Julieta), el tenor Manuel Morales (Tebaldo), el barítono Francisco de Paula Pineda (Lorenzo) y el bajo Ignacio Solares (Capelio). La obra fue dirigida por el mismo Melesio Morales quien dedicó su nueva ópera a su padre, Trinidad Morales. El 27 de enero de 1866 se estrenó su segunda ópera, Ildegonda, un drama lírico en dos actos con libreto de Temistocle Solera en el Gran Teatro Nacional, entonces llamado Teatro Imperial. Por la obra recibió una beca del gobierno del emperador Maximiliano I de México para estudiar en Florenciacon Teódulo Mabellini. En la Ciudad de México, su amigo, el literato y periodista Lorenzo Elizaga publicó en El pájaro verde del 7 de febrero de 1866 una poesía de la que extraemos lo siguiente:
Y cuando en climas remotos Nuevos laureles conquistes, recuerda que tus devotos por donde quiera que existes te acompañan con sus votos; que es de México tu gloria, que tu genio aquí nació, que conserva tu memoria y sigue atento tu historia que prez y orgullo te dio.
Durante su periodo de estudios en Europa confirmó su influencia italiana y rehizo Ildegonda. La ópera se estrenó en el Teatro Pagliano de Florencia. La segunda versión de la ópera fue presentada en Italia en múltiples ocasiones con gran éxito. A su regreso a México, Melesio Morales fue tratado como un héroe, luego de que su segunda ópera había sido aceptada en las principales ciudades italianas. En el Conservatorio enseñó armonía y composición, sustituyendo a Felipe Larios y a Aniceto Ortega. En 1867 escribió su himno "Dios salve a la patria" y dos años después su "Sinfonía Vapor", una obra muy alabada por quienes la llegaron a escuchar, la cual se estrenó el 16 de septiembre de 1869 durante la inauguración del tramo ferrocarrilero México Apizaco. La obra ha sido ejecutada ocasionalmente en los últimos años del siglo XX y primeros del XXI. El 4 de julio de 1877 logra estrenar su ópera Gino Corsini en el llorado Gran Teatro Nacional, entonces llamado Teatro Imperial. La obra se estrenó en la misma temporada en que se vio el estreno de Aída y de la Misa de Requiem de Verdi. Las tres obras fueron cantadas por Ángela Peralta. La nueva ópera de Melesio Morales tuvo éxito y acrecentó su fama. En 1891 estrena en el Gran Teatro Nacional, auspiciada por la Compañía de Ópera Italiana Sieni y con la soprano Salud Othón como protagonista, su ópera Cleopatra. La obra tiene un libreto de Antonio Ghislanzoni, quien colaboró con Giuseppe Verdi en su ópera Aída. La obra se estrenó en el Teatro Nacional. La obra se representó cuatro veces, hecho insólito tratándose de un compositor mexicano. En una de sus crónicas, el poeta Manuel Gutiérrez Nájera escribió con el seudónimo de “Puck”:
Corren rumores alarmantes respecto a la suspención, por dos noches consecutivas, de Cleopatra. Esto coincide con el divorcio y con el monopolio de la carne. Por lo mismo es sospechoso. Una Salud {Othón} que se enferma es inverosímil. El cartel que anunciaba la enfermedad en la primera noche, decía que la señora Othón cantaría Cleopatra al día siguiente. Lo grave del caso es la perturbación que pueden causar en las familias estas suspenciones de a última hora. Supongamos, por ejemplo, que un marido sale del hogar doméstico diciéndole a la señora: -Voy a ver Cleopatra. Él va a ver a Concha, a Petra o a Indalecia, para hacer estudios acerca de las cuestiones palpitantes que preocupan hoy a la prensa y a la sociedad. Vuelve a su casa a la hora que comienzan a vender las jaletinas. Se levanta y, en el desayuno, la señora le dice: -¿Qué tal Cleopatra? -¡Divina! -¿Cantó bien la Othón? -Ni se le conocía que hubiera estado enferma. Por la noche llega al hogar este humilde periódico de ustedes (lo regalo porque no es mío), y en él un parrafito que dice: No se cantó anoche “Cleopatra” por haber seguido indispuesta la señora Othón. La reyerta en inminente. Supongamos que la señora es como nosotros: enemiga de los monopolios. Sabe que su marido, melómano incurable que tararea Lohengrin todas las noches al quitarse los calcetines, va al teatro. Escribe, pues, a Pepe, un billetito diciéndole que de nueve a diez puede ir a verla. El marido que es melómano, pero no tenor de fuerza, ni anda en trapicheos ni se desvela sino con música, viendo que no hay función, vuelve a casa.... Allí oye un mi natural que le hace lanzar un re sostenido... ¡Cleopatra!, ¡Cleopatra!, ¡cuántos crímenes se habrán cometido por tu culpa!. Períódico El Universal (20 de noviembre de 1891)
Otra obra importante en su haber es el Vals Netzahualcoyotl que toma su nombre de una sociedad nacionalista del siglo XIX la cual encargó al maestro su composición. La composición de óperas del último periodo de Melesio Morales coincide con la creación de las óperas, en México de su propio hijo Julio Morales, de Felipe Villanueva, Ricardo Castro y Gustavo E. Campa, entre otros. Este movimiento operístico mexicano formó parte de un movimiento de creación operístico latinoamericano finisecular en el que destacan los nombres del chileno Eliodoro Ortiz de Zárate, los colombianos José María Ponce de León y Augsto Azzali, el brasileño Antonio Carlos Gomes, el uruguayo León Ribeiro y los argentinos Francisco Hargreaves, Miguel Rojas y Edoardo Torrens. Melesio Morales también fundó la revista "La armonía", órgano de difusión de la Sociedad Filarmónica Mexicana. Melesio Morales falleció el 12 de mayo de 1908. Al morir dejó sin estrenar siete óperas, aunque se desconoce si logró terminar dos de ellas.
De estas siete óperas inéditas al momento de su muerte, tan sólo se ha estrenado Anita. Su ópera La tempestadfue mandada a La Scala de Milán para su ejecución, pero nunca se estrenó. El gobierno mexicano nunca se ha preocupado de pedir el regreso de esta partitura, si es que aún se encuentra en los archivos de La Scala. La producción más importante de Melesio Morales está dedicada al escenario. Melesio Morales compuso las óperas Romeo y Julieta, Ildegonda, Carlo Magno, Gino Corsini, Cleopatra (1891), La tempestad, El Judío Errante y Anita. Ésta última, basada en un capítulo de la Segunda Intervención Francesa en México, estuvo guardada en un archivero hasta 1987 en que se presentó en la Sala Nezahualcóyotl.1 En total se le atribuyen alrededor de 130 obras de todo tipo. Melesio Morales fue un incansable promotor de la cultura y la música en México. A su regreso de Italia se dedicó a la docencia, la dirección de orquesta y escribió artículos periodísticos sobre temas relacionados a la música.
Su dedicación pedagógica en el campo de la música lo llevó a participar en la fundación del Conservatorio de Música y Declamación de México. Existe una autobiografía del compositor donde él mismo relata las carencias existentes en el medio cultural y musical mexicano, persistiendo algunas de ellas hasta nuestros días. Su hija María Morales custodió el archivo familiar que luego, en 1956, fue donado al Conservatorio Nacional de Música de México. En tal archivo familiar se reúne más del 95 por ciento de la obra de Melesio Morales, del propio Julio Morales e incluso de Guadalupe Olmedo, la segunda esposa de Melesio Morales y una de las primeras compositoras mexicanas. Durante mucho tiempo se le adjudicó ser la autora del primer cuarteto para cuerdas escrito en México hasta que se encontraron obras de ese género debidas a su maestro Cenobio Paniagua. Dos años después de la muerte de Melesio Morales estalló la (mal llamada) Revolución. Los primeros gobiernos que se hicieron del poder después de tal guerra civil se caracterizaron por estar constituidos por personas de muy limitada preparación y, aún, analfabetas.
Estos gobiernos no tuvieron interés en guardar la memoria de Melesio Morales, su obra y fomentar la cultura operística mexicana que Melesio Morales había alimentado. La situación tampoco cambió cuando se instauró la Dictadura Perfecta y tan sólo ha variado desde los últimos años del siglo XX, poco antes de la restauración de la Democracia en México. Entre los investigadores más importantes dedicados al rescate de la obra de Melesio Morales se deben mencionar a Karl Bellinghausen y Eugenio Delgado Parra. El director de orquesta Fernando Lozano se ha aplicado a la ejecución de las óperas de Melesio Morales.
1839: Melesio Morales, compositor mexicano
Y cuando en climas remotos Nuevos laureles conquistes, recuerda que tus devotos por donde quiera que existes te acompañan con sus votos; que es de México tu gloria, que tu genio aquí nació, que conserva tu memoria y sigue atento tu historia que prez y orgullo te dio.
Durante su periodo de estudios en Europa confirmó su influencia italiana y rehizo Ildegonda. La ópera se estrenó en el Teatro Pagliano de Florencia. La segunda versión de la ópera fue presentada en Italia en múltiples ocasiones con gran éxito. A su regreso a México, Melesio Morales fue tratado como un héroe, luego de que su segunda ópera había sido aceptada en las principales ciudades italianas. En el Conservatorio enseñó armonía y composición, sustituyendo a Felipe Larios y a Aniceto Ortega. En 1867 escribió su himno "Dios salve a la patria" y dos años después su "Sinfonía Vapor", una obra muy alabada por quienes la llegaron a escuchar, la cual se estrenó el 16 de septiembre de 1869 durante la inauguración del tramo ferrocarrilero México Apizaco. La obra ha sido ejecutada ocasionalmente en los últimos años del siglo XX y primeros del XXI. El 4 de julio de 1877 logra estrenar su ópera Gino Corsini en el llorado Gran Teatro Nacional, entonces llamado Teatro Imperial. La obra se estrenó en la misma temporada en que se vio el estreno de Aída y de la Misa de Requiem de Verdi. Las tres obras fueron cantadas por Ángela Peralta. La nueva ópera de Melesio Morales tuvo éxito y acrecentó su fama. En 1891 estrena en el Gran Teatro Nacional, auspiciada por la Compañía de Ópera Italiana Sieni y con la soprano Salud Othón como protagonista, su ópera Cleopatra. La obra tiene un libreto de Antonio Ghislanzoni, quien colaboró con Giuseppe Verdi en su ópera Aída. La obra se estrenó en el Teatro Nacional. La obra se representó cuatro veces, hecho insólito tratándose de un compositor mexicano. En una de sus crónicas, el poeta Manuel Gutiérrez Nájera escribió con el seudónimo de “Puck”:
Corren rumores alarmantes respecto a la suspención, por dos noches consecutivas, de Cleopatra. Esto coincide con el divorcio y con el monopolio de la carne. Por lo mismo es sospechoso. Una Salud {Othón} que se enferma es inverosímil. El cartel que anunciaba la enfermedad en la primera noche, decía que la señora Othón cantaría Cleopatra al día siguiente. Lo grave del caso es la perturbación que pueden causar en las familias estas suspenciones de a última hora. Supongamos, por ejemplo, que un marido sale del hogar doméstico diciéndole a la señora: -Voy a ver Cleopatra. Él va a ver a Concha, a Petra o a Indalecia, para hacer estudios acerca de las cuestiones palpitantes que preocupan hoy a la prensa y a la sociedad. Vuelve a su casa a la hora que comienzan a vender las jaletinas. Se levanta y, en el desayuno, la señora le dice: -¿Qué tal Cleopatra? -¡Divina! -¿Cantó bien la Othón? -Ni se le conocía que hubiera estado enferma. Por la noche llega al hogar este humilde periódico de ustedes (lo regalo porque no es mío), y en él un parrafito que dice: No se cantó anoche “Cleopatra” por haber seguido indispuesta la señora Othón. La reyerta en inminente. Supongamos que la señora es como nosotros: enemiga de los monopolios. Sabe que su marido, melómano incurable que tararea Lohengrin todas las noches al quitarse los calcetines, va al teatro. Escribe, pues, a Pepe, un billetito diciéndole que de nueve a diez puede ir a verla. El marido que es melómano, pero no tenor de fuerza, ni anda en trapicheos ni se desvela sino con música, viendo que no hay función, vuelve a casa.... Allí oye un mi natural que le hace lanzar un re sostenido... ¡Cleopatra!, ¡Cleopatra!, ¡cuántos crímenes se habrán cometido por tu culpa!. Períódico El Universal (20 de noviembre de 1891)
Otra obra importante en su haber es el Vals Netzahualcoyotl que toma su nombre de una sociedad nacionalista del siglo XIX la cual encargó al maestro su composición. La composición de óperas del último periodo de Melesio Morales coincide con la creación de las óperas, en México de su propio hijo Julio Morales, de Felipe Villanueva, Ricardo Castro y Gustavo E. Campa, entre otros. Este movimiento operístico mexicano formó parte de un movimiento de creación operístico latinoamericano finisecular en el que destacan los nombres del chileno Eliodoro Ortiz de Zárate, los colombianos José María Ponce de León y Augsto Azzali, el brasileño Antonio Carlos Gomes, el uruguayo León Ribeiro y los argentinos Francisco Hargreaves, Miguel Rojas y Edoardo Torrens. Melesio Morales también fundó la revista "La armonía", órgano de difusión de la Sociedad Filarmónica Mexicana. Melesio Morales falleció el 12 de mayo de 1908. Al morir dejó sin estrenar siete óperas, aunque se desconoce si logró terminar dos de ellas.
De estas siete óperas inéditas al momento de su muerte, tan sólo se ha estrenado Anita. Su ópera La tempestadfue mandada a La Scala de Milán para su ejecución, pero nunca se estrenó. El gobierno mexicano nunca se ha preocupado de pedir el regreso de esta partitura, si es que aún se encuentra en los archivos de La Scala. La producción más importante de Melesio Morales está dedicada al escenario. Melesio Morales compuso las óperas Romeo y Julieta, Ildegonda, Carlo Magno, Gino Corsini, Cleopatra (1891), La tempestad, El Judío Errante y Anita. Ésta última, basada en un capítulo de la Segunda Intervención Francesa en México, estuvo guardada en un archivero hasta 1987 en que se presentó en la Sala Nezahualcóyotl.1 En total se le atribuyen alrededor de 130 obras de todo tipo. Melesio Morales fue un incansable promotor de la cultura y la música en México. A su regreso de Italia se dedicó a la docencia, la dirección de orquesta y escribió artículos periodísticos sobre temas relacionados a la música.
Su dedicación pedagógica en el campo de la música lo llevó a participar en la fundación del Conservatorio de Música y Declamación de México. Existe una autobiografía del compositor donde él mismo relata las carencias existentes en el medio cultural y musical mexicano, persistiendo algunas de ellas hasta nuestros días. Su hija María Morales custodió el archivo familiar que luego, en 1956, fue donado al Conservatorio Nacional de Música de México. En tal archivo familiar se reúne más del 95 por ciento de la obra de Melesio Morales, del propio Julio Morales e incluso de Guadalupe Olmedo, la segunda esposa de Melesio Morales y una de las primeras compositoras mexicanas. Durante mucho tiempo se le adjudicó ser la autora del primer cuarteto para cuerdas escrito en México hasta que se encontraron obras de ese género debidas a su maestro Cenobio Paniagua. Dos años después de la muerte de Melesio Morales estalló la (mal llamada) Revolución. Los primeros gobiernos que se hicieron del poder después de tal guerra civil se caracterizaron por estar constituidos por personas de muy limitada preparación y, aún, analfabetas.
Estos gobiernos no tuvieron interés en guardar la memoria de Melesio Morales, su obra y fomentar la cultura operística mexicana que Melesio Morales había alimentado. La situación tampoco cambió cuando se instauró la Dictadura Perfecta y tan sólo ha variado desde los últimos años del siglo XX, poco antes de la restauración de la Democracia en México. Entre los investigadores más importantes dedicados al rescate de la obra de Melesio Morales se deben mencionar a Karl Bellinghausen y Eugenio Delgado Parra. El director de orquesta Fernando Lozano se ha aplicado a la ejecución de las óperas de Melesio Morales.